El pasado 11 de octubre, once trabajadores “fantasmas” fueron detectados en la obra de asfaltado de la carretera Calacoa-Ticsani, que se ejecuta en la zona alta de la región. Ellos intentaron cobrar montos por encima de los S/.1, 800 a S/.2,000 cada uno, a pesar de no haber laborado en este proyecto. El trámite incluso se hizo con firmas fraguadas de algunos funcionarios. El fraude se iba a perpetrar por un monto total de S/.21 mil 439. Una advertencia del regidor Carlos Mercado permitió frustrar el cobro ilícito. Pocos días después, otras planillas falsas fueron descubiertas en la vía trocha Morro Cambrune-Somoa. Cuatro obreros fueron consignados en la planilla de esta vía como operarios. Uno de ellos logró cobrar por setiembre. Estos hechos fueron denunciados por el procurador Anticorrupción de Moquegua, Fernando Catacora, ante el Ministerio Público, donde aún se realizan las investigaciones preliminares. El regidor Óscar Vilca refiere que cada uno de funcionarios citados deberán de presentar sus informes de cómo se consignó y se trató de pagar a obreros que no laboraron en algunas de las obras municipales. Vilca sostiene que por esta irregularidad, además de la vía penal, tiene que haber una sanción administrativa en el municipio. Tras el escándalo, el alcalde provincial Coayla Vilca removió solo a dos de sus funcionarios de menor rango. Entre los que pagaron los platos rotos están el subgerente de Obras, Macario Flores, y el subgerente de Personal, Ower Mendoza. Para el regidor Carlos Mercado debe de haber otros cambios, en particular en áreas claves como Logística y Administración. Este tema se debatirá en sesión de este sábado a partir de las 6.00 horas.
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