La Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) destacó que este proyecto plantea la primera “gran reforma” de este tipo en los últimos treinta años. Se trata, dijo, de una reforma progresiva, pero irreversible, que propone la creación de un nuevo régimen al que se incorporarán voluntariamente y a través de concurso más de 500 mil servidores públicos de los tres niveles de gobierno pertenecientes a los antiguos regímenes. De acuerdo a la propuesta, la regulación de las carreras especiales, como las Fuerzas Armadas, Policía Nacional, Salud, Educación, etc. será respetada, así como el régimen de empresas públicas. Sin embargo, los aspectos claves de la reforma, como la capacitación y el régimen disciplinario, se aplicarán de manera supletoria a los regímenes especiales. Según la PCM, el resultado de esta reforma será un Estado más cercano al ciudadano, obras de mejor calidad y servicios públicos eficientes.
Meritocracia: Asimismo, destalló que con la entrada en vigencia del nuevo régimen, el ingreso, la permanencia y la progresión de los servidores públicos estarán asociados al mérito y se establecerá un sistema de gestión de resultados, así como una evaluación periódica de desempeño, reduciendo las inequidades en sus deberes y derechos así como la contratación temporal, que actualmente alcanza el 30 por ciento. Se garantizará también una mayor continuidad de las políticas públicas, al reducir la alta rotación del personal en el sector público y reteniendo a los trabajadores calificados. Esta reforma implica la creación de una carrera pública que les permitirá a los empleados públicos progresar y ejercer su labor en todas las entidades del Estado. La reforma fortalecerá la capacidad directiva del Estado, pues la plana directiva o gerencial permanecerá en sus puestos en función al cumplimiento de metas. Finalmente, se creará un régimen especial para las municipalidades pequeñas con el fin de facilitar su gestión de personal y reducir la burocracia. Cabe destacar que los servidores públicos tendrán los incentivos necesarios para incorporarse al nuevo régimen laboral, mientras que el personal bajo contratación temporal no pasará automáticamente, sino que podrá ingresar en función a las necesidades y previo concurso público. Las evaluaciones constituyen un mecanismo de medición del desempeño con el objetivo de mejorar la gestión. Sin embargo, se admite la posibilidad de salida en que caso de que el trabajador sume dos evaluaciones desaprobadas con derecho a capacitación. El proyecto de ley, enviado hoy al Parlamento, llevas las rúbricas del presidente de la República, Ollanta Humala; y del titular del Consejo de Ministros, Juan Jiménez Mayor.
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